En el verano de 1990 durante la construcción de una vivienda en las inmediaciones de Alcalá del Júcar (Albacete) se descubrieron varios molares y restos de huesos. Estos restos eran de tres grandes vertebrados (un mastodonte, un rinoceronte y un antílope) y también de microvertebrados (roedores, insectívoros, crustáceos y gasterópodos).
Los fósiles se descubrieron aproximadamente a 1,5 km al oeste de la población de Alcalá del Júcar, en el lugar conocido como Rincón de San Lorenzo, en la carretera que va de Alcalá del Júcar a La Recueja
Geológicamente el lugar pertenece a las formaciones neógenas continentales de los valles del Júcar y Cabriel. Se comunicó el hallazgo al Museo de Albacete, y se organizó una excavación dirigida por A. Mazo y financiada por la Consejería de Educación y Cultura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Desde el blog de casas rurales en Alcalá del Júcar “Casas del Herrero” te ofrecemos esta noticia que el periódico la tribuna publicó referente a este descubrimiento. Por la curiosidad de la noticia la transcribimos tal cual la hemos encontrada publicada.
HALLADOS FOSILES DE UN MASTODONTE EN ALCALÁ DEL JÚCAR
( La Tribuna)
En el museo de Albacete están de enhorabuena por la importancia que tienen los restos de un animal prehistórico (un anancus) que acaban de encontrar en Alcalá del Júcar.
De forma casual fueron encontrados por Francisco Torres, natural de Alcalá del Júcar, pero residente en Peñascosa, cuando estaba excavando el acceso a una cueva de recreo en terrenos de su propiedad. «Fue allí cuando halló los siete molares». Inmediatamente dio parte de su hallazgo. Llamó a una chica que es amiga suya y que trabajaba en el Ministerio de Cultura en Arqueología.
Una vez se dio cuenta al Museo de este hallazgo, la directora, Rubí Sanz, fue a ver los restos del animal prehistórico. «Yo he elaborado un informe previo para la Consejería de Educación y Cultura, contando las circunstancias del hallazgo y pidiendo que se desplace a Alcalá del Júcar un paleontólogo porque considero que en aquel lugar, situado a un kilómetro del pueblo, en dirección a La Recueja, hay que hacer una excavación de urgencia», explicó la arqueóloga.
Hizo hincapié Rubí Sanz en que no sólo había que hacer en ese enclave una excavación de urgencia, sino además protegerlo de las depredaciones de los posibles clandestinos. «Puede haber gente que diga ¡Ah! Pues voy a ver si encuentro yo otra muela, y vaya y te reviente el yacimiento. Por eso es importantísimo evitarlo por todos los medios».
Rubí Sanz confirmó que estos fósiles eran los primeros que de anancus se encontraban en la provincia de Albacete. «Lo que hay es de otro tipo de elefante, el elphas meridionalis. Pero del anancus que es un mastodonte, no había nada».
Dijo también Rubí Sanz que el anancus era más antiguo que esa otra especie de animal prehistórico de la que ya se habían encontrado restos en la provincia de Albacete, concretamente en unos areneros de Fuensanta. «El anancus es más antiguo porque es un animal terciario, pero que tiene una corta pervivencia durante los comienzos del pleistoceno».
Rubí Sanz mostró su satisfacción por el hallazgo de estos restos en la Hoz del Júcar e insistió en que, con todo, primero, había que esperar a conocer la opinión de un paleontólogo y, segundo, emprender unas excavaciones de urgencia.
Hay que felicitar al vecino de Alcalá del Júcar que ha encontrado los restos por su acción cívica ejemplar de dar cuenta inmediatamente del hallazgo de estos fósiles, que vendrán a enriquecer el patrimonio cultural del Museo en particular y de Albacete en general. Se ha dicho en numerosas ocasiones que toda la provincia de Albacete es un yacimiento, pero aún son pocos los ciudadanos que al encontrar restos arqueológicos o paleontológicos avisan a nuestras autoridades culturales para que éstos puedan ser estudiados y posteriormente contemplados por todos los albacetenses.
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