Junto al cerro donde se construyó el Castillo de Alcalá del Júcar y se asentó la primera población alcalaeña y su primera iglesia, hay otra muela denominada «Bolinche Manazas» que tal vez estuvieron unidas las dos por una pasarela.
En este conocido peñón, se han explorado multitud de antiguas cuevas, en la actualidad muy deterioradas, pero que muestran que en aquella época, sirvieron de almacén, de criadero de aves y resguardo para los habitantes, teniendo una de ellas en su interior, incluso un pozo, que se cree que llega hasta el nivel del propio río Júcar, que servía a los soldados moros para descender al río a recoger agua para el abastecimiento de la fortaleza.
casas rurales «Casas del Herrero»
Tolosa-Alcalá del Júcar
www.casasdelherrero.com